Para poder disfrutar al máximo del bricolaje, debes tener en cuenta un par de puntos a la hora de adquirir la herramienta correcta.
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Para poder disfrutar al máximo del bricolaje, debes tener en cuenta un par de puntos a la hora de adquirir la herramienta correcta.
- La seguridad: a la hora de comprar la herramienta, comprueba que tenga un sello de comprobación. El certificado alemán más extendido es «GS» (Geprüfte Sicherheit), que significa «seguridad probada». «CE» confirma que la herramienta cumple las normas de seguridad de la CE. También puedes orientarte por otros distintivos, como TÜV o VDE.
- La empuñadura: una buena empuñadura está hecha de madera lisa barnizada o de metal de contacto seguro, o dispone de un revestimiento de plástico. Las mejores son las empuñaduras ergonómicas de plástico de dos o más componentes. Las asociaciones de defensa del consumidor desaconsejan las herramientas de bajo precio, ya que ya se han encontrado materiales cancerígenos en las empuñaduras.
- El material: para la calidad de las llaves de tornillos, los destornilladores o las tenazas es decisiva la dureza del metal utilizado. Las herramientas mecánicas de alta calidad se fabrican con acero templado. Busca el sello «HSS» (acero rápido) en las herramientas.
- La prueba: antes de comprar una herramienta, comprueba si es fácil de manejar y si sus diferentes componentes están ensamblados de forma segura. La cabeza de un martillo, p. ej., nunca puede estar suelta; en un destornillador nuevo la elección será buena si la punta está endurecida o está revestida de polvo de diamante.
